23 de abril Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor
El 23 de abril es una fecha simbólica para la literatura universal, ya que ese día nació William Shakespeare, y en esa misma fecha, pero en 1616, murió coincidentemente, otro gran dramaturgo e hidalgo caballero de las letras: Don Miguel de Cervantes Saavedra.
En esta fecha, el mundo organiza ferias internacionales, pláticas con autores, presentaciones, coloquios, mesas redondas, conferencias, charlas, círculos de lectura… en fin, un sinfín de eventos para celebrar y rendirle homenaje al mejor concepto creado, evolucionado y perfeccionado por la cultura de la humanidad: el libro.
La historia del libro se remonta hacia las primeras manifestaciones de expresión en la pintura rupestre; la necesidad de aquellos hombres de plasmar de una manera gráfica su preocupación de ser perseguidos por grandes bestias si salían al exterior y la consecuente elaboración de la estrategia para acabar con ellos y dominarlos.
Mucho después vino la escritura, como un concepto que abstraía los pensamientos y las cosas con las palabras; con éstas fue surgiendo el libro, la mejor forma de preservar creencias y conocimientos en el espacio y en el tiempo.
El Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor, fue creado por la UNESCO y tiene como principal objetivo el estímulo a la lectura y a la creación literaria. Para coronar el evento, esta institución hace entrega del Premio de Literatura Infantil y Juvenil en Pro de la Tolerancia. La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la UNESCO, con la meta de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual a través de los derechos de autor.
Desde 2001, año en el que Madrid fue la Capital Mundial del Libro, la UNESCO junto con otras organizaciones, integran un comité que selecciona a una de las ciudades en el orbe para que realicen durante el año diversas actividades culturales relacionadas con los libros. Este es un evento que ha marcado un éxito internacional sin precedentes y que –no sólo cumple ampliamente con sus objetivos- sino que además constituye un evento social y cultural de trascendencia que ha generado réplicas en otros eventos de su tipo en el mundo.
¿Qué si el libro va a desparecer? Es como pensar que la fotografía hubiera desplazado a la pintura, el cine al teatro, la videocasetera a la sala cinematográfica. Cada manifestación o creación comunicacional adopta su propio lenguaje. Es más, cuando algo nuevo surge, hace que lo demás evolucione.