A lo largo de la historia cada cultura ha establecido un significado al concepto de infancia. La definición de niño se basa en el periodo de duración, su naturaleza y sus capacidades. La sociedad determina cómo debe verse y comportarse, mientras el entorno de la familia y la escuela va guiando su conducta y definiendo el rol que ha de desempeñar.
La exposición Los niños del siglo XIX presenta el contexto de la cultura material en la que vivió un sector de los niños mexicanos. La variedad de objetos que se exhiben es una muestra de las soluciones que se han dado a las necesidades modernas de la infancia.
Durante la época virreinal los niños eran educados bajo estrictas normas morales y religiosas. En el núcleo familiar eran considerados miembros en formación de una sociedad de adultos.
En el siglo XVIII, las concepciones científicas y liberales de la Ilustración, los cambios políticos y sociales derivados de la Revolución Francesa y los movimientos de independencia que abolieron la esclavitud, permitieron gestar una nueva noción del hombre, lo que a su vez implicó otra forma de ver y entender a la infancia.
Las ideas del escritor y filósofo francés Juan Jacobo Rousseau fueron determinantes para comprender al niño como una entidad con personalidad propia. Los niños se volvieron sujeto de estudio serio. “No sabemos nada de la infancia”, advirtió Rousseau en 1762.
Hasta la primera mitad del siglo XVIII, en la cultura occidental, existieron muy pocos objetos exclusivos para los niños. Fue hasta el siglo XIX, con la Revolución Industrial, que aparecieron productos en serie hechos para ellos, muebles y ropa a su escala, así como juguetes que los divirtieran. Este cambio en la percepción de la sociedad consolidó un lugar propio para la niñez.
La exposición se presentó del 09 de julio al 25 de octubre de 2015.