Los esmaltes de uñas han sido los mejores amigos de mi abuelita y yo en este confinamiento. Hemos declarado “la tarde de chicas”, donde disfrutamos una buena plática llena de risas, alegría y color.
Los esmaltes de uñas han sido los mejores amigos de mi abuelita y yo en este confinamiento. Hemos declarado “la tarde de chicas”, donde disfrutamos una buena plática llena de risas, alegría y color.