Otro año, otra nueva oportunidad …
Así pasa un año más… un 2018 que nos deja momentos que recordaremos con cariño, otros no tanto, pero que están por ser parte del pasado.
Hoy tenemos la oportunidad para comenzar de nuevo y plantearnos los propósitos que estamos dispuestos a conseguir este próximo año.
El año nuevo además de ayudarnos a reflexionar en nuestras metas, es una celebración todos nos gusta porque es una fecha donde suele reunirse toda la familia y amigos, los mexicanos en especial solemos hacerlo con una gran cena con diferentes platillos tradicionales como, el pavo relleno, romeritos, lomo de cerdo, pozole, tamales y un caliente ponche.
Y por supuesto que no podemos dejar atrás los rituales que suelen hacerse el ultimo día de año viejo.
- El más común y el que casi todos hacemos en víspera de Año Nuevo, es comer 12 uvas junto con las últimas 12 campanadas de año, por cada uva un deseo.
- Usar ropa interior roja para atraer el amor o amarilla para la prosperidad
- Salir a media noche a dar una vuelta en la cuadra con una maleta para que viajes en el 2019.
- Abrazo de ¡Feliz Año Nuevo! para toda tu familia
- Barrer tu casa para deshacerse de las energías negativas que dejo el año viejo
Toda esta tradición se remonta a Roma en el año 46 a. C. para dar homenaje a Jano, dios pagano de las puertas y del comienzo; con grandes comidas, ofrendas, ramas y dulces, Julio César decidió dedicarle una fiesta con la que recibía en alegría y abundancia el año nuevo. Es por eso que el mes de enero se llama, ya que tiene dos caras que pueden representar el mirar hacia atrás al año viejo y la otra mirando hacia adelante, hacia el nuevo.
Cada país tiene sus propias costumbres y maneras de celebrar el comienzo de un año nuevo, por lo mientras nosotros deseamos que se cumplan todos sus propósitos y que el nuevo año sea el mejor de su vida y les traiga paz y prosperidad a todos.