Entradas triunfales
En 1941 se presenció el primer acto de gimmick (interpretación de un personaje), en la historia de la lucha libre estadounidense. Se trataba de la aparición del Magnífico George, un hombre excéntrico, con rizos seductores, una gabardina ataviada de plumas, y una estética sumamente cuidada que reflejaba una actitud seductora y un poco afeminada.
La apariencia de George llamó rápidamente la atención de los aficionados, la gente asistía a las arenas y lo convertían en objeto de burlas y chistes. En ese momento, la lucha estadounidense cambio por completo y adquirió un nuevo sentido. La promotora ganó la atención del público a través de la apariencia ridícula y absurda del Magnífico George y de repente, este “frágil” luchador se convirtió en el evento principal de lucha libre estadounidense.
Las entradas al ring de George, dejaron de ser simples presentaciones y se transformaron en un performance que combinaba con las extravagancias del peleador. Johnny Doyle, empresario que promovía las luchas de George, lo motivó y patrocinó para que el luchador tuviera unas entradas destacadas; de esta manera, George ingresaba al ring al mismo tiempo que repartía pequeños broches plateados entre los asistente y por primera vez en la historia de la lucha libre, se escuchaba una tema musical de fondo en los altavoces del inmueble. El camino de George al cuadrilátero, complementaba con destellos de luces púrpura y una edecán que lo acompañaba.
El impacto de George en la lucha libre internacional fue tan gigantesco, que hasta la fecha se reproducen entradas-performance, en el camino de los luchadores al ring. Claro que la adopción de estas presentaciones, se asimiló en momentos diferentes. En México las entradas-performance, aparecieron hasta finales de la década de los ochenta, cuando Televisa volvió a integrar la lucha libre dentro de su programación.
La televisora de Emilio Azcárraga, buscó darle un giro diferente a la lucha libre mexicana y una parte esencial la encontraron en éstas entradas al ring. Televisa buscó que se produjera un impacto visual entre los espectadores y la lucha libre, cosa que consiguió implementando luminotecnia, un complemento musical de fondo, edecanes de compañía y en ocasiones pirotecnia.
En un principio la afición mexicana no se identificó con las entradas-espectáculo que se empezaron a difundir, pero con el tiempo no sólo se adaptaron, sino que se convirtieron en algo indispensable dentro de las promociones. Uno de los primeros luchadores que utilizó estos arribos triunfales fue Máscara Sagrada, quien incluía una especie de cantos gregorianos en su llegada al ring. En la actualidad, las entradas-espectáculo son utilizadas por todos los luchadores mexicanos, y en ellas se refleja la personalidad de cada combatiente.