La pintura, una historia llena de color

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Todos o la mayoría de las personas hemos usado algún tipo de pintura en cualquiera de sus presentaciones o derivados para realizar actividades decorativas, artísticas o simplemente experimentar con este noble material que da color a gran parte de las cosas que se encuentran a nuestro alrededor. Hoy en día es muy fácil conseguirlas por la amplia oferta que existe de este producto. Pero, te has preguntado ¿Cómo le hacían nuestros antepasados para obtener los pigmentos? Aquí te contamos un poco sobre los antecedentes de la pintura.

Por medio de diversos estudios, se sabe que los primeros humanos obtuvieron pigmentos o colores a través de sustancias naturales como la tierra, arcillas, sangre, carbón de leña, jugos de frutos y manteca de cerdo.

Más tarde, arqueólogos y antropólogos descubrieron manifestaciones artísticas en cavernas pintadas con dibujos a color y grabados en piedra, que van desde los 40,000 hasta los 76,000 años de antigüedad y que hoy conocemos como pinturas rupestres.

A partir de estas representaciones la técnica pictórica fue mejorando por las distintas civilizaciones antiguas, entre ellas: China, Mesopotamia, Egipto, Grecia, Roma, Fenicia y Asia— quienes comenzaron a utilizar materiales más sofisticados para producir bálsamos como pintura para sus distintos usos.
Obtenían los pigmentos de diversas maneras, por ejemplo, el color blanco era una base de plomo blanco y tierras naturales como el barro y yeso, el negro era carbón y grafito natural, los pigmentos amarillos eran minerales óxidos como polvo de oro y litargirio, los rojos también eran obtenidos de óxidos, pero específicos del hierro y plomo rojo. Para que estos tonos perduraran sus aglutinantes fueron la goma arábiga, pegamento, huevo, gelatina, cera de abeja, grasas animales y savias de diversos árboles.

Generar nuevos tonos no fue tan sencillo y menos si querían pigmentos que duraran mucho tiempo. Una forma en la que los egipcios consiguieron más variedad de colores fue pulverizando finamente y mezclando tierra de diferentes colores con clara de huevo, aun así, la gama de colores era limitada. Por lo que continuaron explorando diversos métodos para obtenerlos. Un dato curioso es que, para obtener un gramo de pigmento púrpura, ellos usaban la mucosa de casi diez mil caracolas. ¿Te imaginas todo lo que implicaba esto para fabricar un sólo color?

Es muy interesante saber cómo surgieron los primeros pigmentos y lo limitado que eran, actualmente contamos con infinidad de tonalidades y en todas las formas posibles, con el fin de llegar a una gran variedad de aplicaciones y técnicas que ayudan al cuidado, resistencia, brillantez y durabilidad de una obra.

Ahora que lo sabes, entenderás mejor porque las pinturas artísticas muchas veces tienen costos elevados.

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