Durante este confinamiento lo que más extraño es ir con mis amigos de la cancha al Estadio Azteca. ¡Vaya tragedia la nuestra! Un día decidimos tener reuniones en ZOOM para estar cerca. De repente, se nos ocurrió invitar a ex jugadores americanistas para charlar y que la gente también participara. Y con una LAP, un CEL, mucho entusiasmo y mi BANDERA armamos grandes pláticas con aquellos que fomentaron esta pasión. En cada charla aparecía como fondo mi hermosa bandera azulcrema.