Sanborns y la crema Teatrical
En 1903, Walter y Frank Sanborn fundaron una pequeña droguería en la ciudad de México. Pronto sumaron al negocio la primera fuente de sodas de la capital, entre cuyos clientes asiduos figuraban Porfirio Díaz, su esposa Carmelita y la crema y nata de la sociedad mexicana.
En diciembre de 1916, cuando Pancho Villa y Emiliano Zapata hicieron su entrada triunfal en la ciudad de México, la tropa zapatista tomó café y pan dulce en el Sanborns de la calle Madero, en el local que hoy ocupa la Librería Madero.
El 11 de octubre de 1919, y luego del regreso de su hermano Walter a Estados Unidos, Frank Samborn concentra el concepto Sanborns en un solo lugar, localizado en Madero 4, y mejor conocido como La Casa de los Azulejos. El éxito fue rotundo: concentraba en un solo lugar restaurante, salón de té, fuente de sodas, tienda de regalos, farmacia, dulcería, librería, música y tabacos, así como arte popular y plata mexicana de excelente calidad. Debido a ello se la conoció como La Casa del Buen Gusto.
Sus distintivos son los tres tecolotes, que hacen referencia a Frank y a sus dos hijos; la vajilla azul y blanca; los claveles blancos y rojos en un florero color azulejo; el uniforme de las meseras; los chocolates hechos a mano; el Agua de Colonia Sanborns y la crema Teatrical, con sus famosos envases de color rosa y azul; su uso es una costumbre para muchas mujeres de México ya sea para desmaquillarse o como ingrediente de una receta casera para blanquear el cutis.